En los últimos tiempos, hemos asistido a la aparición de una ¿nueva? propuesta educativa relacionada con los aspectos ecológicos y sociales que arrastra la crisis global que afecta gravemente a la vida del planeta: la educación ecosocial. Pero, ¿de qué hablamos cuando hablamos de educación ecosocial? ¿De educación ambiental? ¿De educación para el desarrollo sostenible? ¿De educación para la sostenibilidad? ¿De educación para la transformación? ¿De nada de lo anterior? ¿De todo?

A lo largo del texto, navegaremos a través de su multiforme motivación, en sus enfoques y elementos, y recalaremos en una visión vinculada a la necesidad de construir una nueva ética ecosocial. Un enfoque que aúne investigación, empoderamiento y acción transformadora ecosocial.

La urgente transición hacia horizontes socialmente justos y ecológicamente sostenibles precisa de personas formadas para dar las respuestas necesarias. En este contexto, surge una nueva narrativa educativa, íntimamente vinculada a la educación ambiental no neoliberal, a la educación para el desarrollo, para la ciudadanía global, para el decrecimiento o para la ecociudadanía denominada educación ecosocial (EE en adelante).

La EE es un proyecto en construcción que trata de convertirse en realidad, con un creciente protagonismo. La intención de este artículo es exponer los términos que la articulan y generar nuevos elementos de debate.

A modo de ensayo expositivo, tras un breve recorrido sobre las primeras propuestas de EE, dialogaremos acerca del Antropoceno y sus causas, la esperanza y el enfoque ecosocial, y se expondrán ideas para su desarrollo pedagógico.

La EE es una propuesta joven, circunstancia que se puede observar, por ejemplo, en la evolución del nombre de la sección educativa de Ecologistas en Acción, que utilizó el término educación ambiental (EA en lo sucesivo) hasta 2003, posteriormente adoptó diferentes denominaciones y, desde 2017, utiliza EE.

En ciertos sectores, el término ambiental simplemente ha sido sustituido por el más moderno, y quizás menos ambiguo, de ecosocial, aunque siguiendo con sus prácticas tradicionales, bien como cómplices con el sistema hegemónico, bien promoviendo transiciones justas y sostenibles. En otros, se contempla la Teoría Ecosocial de la epidemiología social de Krieger (1994). Finalmente, se vislumbra una corriente de pensamiento apuntalada en la educación y en la centralidad de la vida, que es en la que nos vamos a concentrar.

La diversidad de visiones, unida a la extensa nomenclatura de lo que se entiende por EA, no facilitan la comprensión ni la construcción de esta propuesta.

Houwer (2006), una de las primeras autoras que cita de EE, afirma que es un proceso dialógico orientado al crecimiento humano dentro de la crisis de injusticia que vive la humanidad.

Para Salonen y Åhlberg (2012), la nueva EE trata de ayudar a comprender el equilibrio entre la libertad y la responsabilidad de los seres humanos en un planeta finito. Así, su objetivo sería un ser humano civilizado, que se ocupa de sí mismo y de su cultura, de la vida en la Tierra y de las posibilidades de las generaciones futuras.

Halinen (2018, p. 84), al hacer referencia a la renovación del plan de estudios finlandés de 2017, afirma que la misión de la escuela es:

Inspirar esperanza en un buen futuro sentando las bases para el conocimiento y las habilidades ecosociales (…) Se anima al alumnado a afrontar la diversidad del mundo con una mente abierta y curiosidad y a actuar por un futuro más justo y sostenible.

En el Estado, en 2015, frente a la rigidez curricular llena de contenidos, Ecologistas en Acción publica 99 preguntas y 99 experiencias para aprender a vivir en un mundo justo y sostenible. La obra trata de desmontar el pensamiento único para construir con el alumnado un nuevo paradigma cultural que permita sobrevivir con dignidad y justicia.

Assadourian (2017) es una de las primeras grandes referencias con Educación ecosocial. Cómo educar frente a la crisis ecológica, donde propone preparar al alumnado para vivir en un planeta cambiante, en una era geológica nueva, el Antropoceno. La obra propone seis principios básicos: ecodependencia, interdependencia, creatividad, aprendizaje profundo, liderazgo centrado en la Tierra y capacitación para la vida.

Por su parte, Fuhem publica Educar para la transformación ecosocial. Orientaciones para la incorporación de la dimensión ecosocial al currículo (González, 2018), donde refleja la importancia de incorporar contenidos ecosociales a la actividad escolar de forma transversal.

También aparece la obra Educatio ambientalis. Invitación a la EE en el Antropoceno (Gutiérrez, 2018), que desarrolla su propuesta por la ética ecosocial como base de una nueva educación, esencial para afrontar las vitales transiciones ecológicas y sociales.

Paralelamente, organizaciones o movimientos relacionados históricamente con la EA formal como Ecologistas en Acción, Fuhem, ESenRED —Escuelas hacia la Sostenibilidad en Red—, Teachers for Future, Alboan o Intermon-Oxfam impulsan reflexiones sobre el enfoque ecosocial. Así, las iniciativas, programas y proyectos se van adaptando a este nuevo planteamiento.

Estas propuestas iniciales apuntan a un enfoque ecosocial asentado en la realidad de una crisis ecológica y social sin precedentes, el pensamiento ecofeminista, la construcción de una ética ecosocial, la profundización democrática, el buen vivir y el decrecimiento material. Aspectos que nos desafían a pensar críticamente sobre nuestra contribución a las cuestiones ecológicas y sociales y acerca de cómo transitar hacia escenarios socialmente más justos y ecológicamente más sostenibles.

En el proceso de redacción de la última ley educativa, la Lomloe, varios movimientos a favor de una EE (Ecologistas en Acción, Fuhem, Movimiento #EA26, ESenRED, Teachers for Future, algunos sindicatos…) lograron exponer sus argumentos. La ley, sin tener enfoque ecosocial, contempla en sus desarrollos curriculares tópicos de la EE como “problemas ecosociales”, “conciencia ecosocial”, “responsabilidad ecosocial”, “ecodependencia”, “interdependencia”, entre otros.

La EE, formal o informal, asume su carácter político (no neutral) para poner la vida en el centro de toda toma de decisión. Las personas educadas ecosocialmente buscarán una buena vida para todos los seres vivos, en todas partes y para siempre.

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Gutiérrez-Bastida, J. M. (2025). De que hablamos cuando hablamos de educación ecosocial. Revista de Educación Ambiental y Sostenibilidad 6(2), 2101.

Doi: 10.25267/Rev_educ_am-bient_sostenibilidad.2024.v6.i2.2101